Tanto si eliges un saco de dormir con relleno de plumón o sintético, es importante que lo cuides bien para que te dure mucho tiempo. 


Consejos para mantener tu saco de dormir en óptimas condiciones

  • Evita que tu saco de dormir se empape de agua, ya que esto afectará en gran medida a su rendimiento.
  • Lávete antes de acostarse: de lo contrario, la suciedad del día puede impregnar el material y el aislamiento, afectando al rendimiento con el tiempo. Para evitarlo, utiliza un forro que proteja tu saco de dormir del mismo modo que una sábana protege tu colchón. 
  • Las cremalleras pueden atascarse, pero no las abra a la fuerza ni tires de la tela de la cremallera, ya que puede dañarla. Esto es especialmente importante para los sacos de dormir ligeros, ya que su tejido suele ser más fino para ahorrar peso. 
  • La compresión a largo plazo afectará al aislamiento y al rendimiento térmico de tu saco de dormir. Si vas a viajar durante varios días, debes desempacar tu saco de dormir lo antes posible para que se afloje y se airee. Cuando vuelvas a casa después de un viaje, debes dejar que el saco de dormir se ventile y luego guardarlo en una bolsa grande para que pueda desplegarse adecuadamente entre usos.
  • Evita lavar el saco de dormir con demasiada frecuencia y, en su lugar, intenta limpiarlo sólo por zonas. Si realmente necesitas limpiar tu saco de dormir, asegúrate de seguir las instrucciones del fabricante.